jueves, 28 de junio de 2012

Una delicada aproximación. (SUS SCROFA)


  Hacía tiempo que no pisaba los Valles de Trubia, esta zona de la montaña central asturiana es mundialmente conocida por la presencia de osos en sus bosques además de una gran variedad de fauna ibérica como el lobo y numerosas colonias de aves carroñeras.
 El calor aprieta estos días en Asturias, así que busqué una buena sombra y con los prismáticos disfrutaba de los vuelos de un grupo de buitres leonados y  más tarde del planeo del alimoche, como decía es un zona frecuentada por aves necrófagas. El resto de los "habitantes"seguramente haría lo mismo que yo, protegerse del sol. Esperé a que descendieran las temperaturas y al borde del atardecer salí de mi puesto. Sin un rumbo fijo comencé a caminar; como no, los rastros de ungulados eran muy abundantes. Había salido del camino; algo se escuchaba unos metros más arriba, era una zona de altas hierbas tan características de la época estival que atravesamos, los sonidos cada vez se oían más cerca... Subido a una roca y con la cámara en la mano me asomé al "prao" de donde procedían esos peculiares gruñidos... Y allí estaban...




  Un grupo familiar interactuaba en la pradera sin ser conscientes de mi presencia. Tardaron en detectarme un espacio de tiempo lo suficientemente generoso como  para permitirme tomar estas imágenes. (El ejemplar de la fotografía de arriba es el macho, el de abajo la hembra.)


  La adrenalina al máximo al igual que las pulsaciones, estaban muy cerca... Entre foto y foto, me permití el lujo de hacer esta toma de vídeo que muestra el vigor de este animal y como se alimenta levantando capas del terreno. 


                                        



   Su olfato me delató, pero al estar en una posición más elevada que la de ellos, en la roca, les dificultaba mi localización.








  La mirada del gran berraco clavada... Cuando  esperaba que al verme emprendería la huida, me sorprendió un potente gruñido y un ágil movimiento con el cual se acercó un par de metros más a mi situación. Estaba subido a una roca y consciente de ello creo que fue lo que contribuyó a  enfriar mi mente para no salir despavorido... El osado patriarca trataba de reunir a los 4 rayones que jugaban entre las altas hierbas. Cuando llamó la atención de su familia, el valiente ungulado los sacó de la zona de riesgo.

  Aquí os dejo otro tembloroso vídeo que muestra la salida de los 6 jabalíes del "prao" donde estaban, ascendiendo al colindante a un nivel superior, exactamente a la altura que yo me encontraba, como podéis intuir, cogí la cámara y abandoné la zona rápidamente, las emociones para este día eran más que suficientes y una familia de jabalíes con cría puede ser realmente peligrosa...






           



2 comentarios:

  1. Bufff!!!Si las de la anterior entrada eran buenas estas ya se salen....Vaya cague el bicho plantándote cara....
    Saludos compañero.

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  2. Muchas gracias compañero!! Gracias por tu comentario y me satisface saber que aprecias las fotografías. La jornada fue emocionante, aunque desde una posición segura, ver a este animalito enfadado es impactante...

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